El show abrió con un homenaje solemne al fallecido Hulk Hogan, con 10 campanadas y todo el roster presente en la rampa. Triple H, CM Punk, John Cena y más leyendas participaron.
En un combate mixto muy esperado, AJ Styles, Asuka y Kairi Sane derrotaron a Dominik Mysterio, Raquel Rodriguez y Roxanne Perez. El final llegó tras un Phenomenal Forearm directo sobre Dominik para el conteo de tres.
Drew McIntyre viajó al Reino Unido para asistir a una boda familiar y, según se informa, no ha podido abordar su vuelo de regreso por no presentar su pasaporte estadounidense. Esto ha encendido las alarmas en WWE, ya que McIntyre tiene una lucha programada junto a Logan Paul frente a Randy Orton y Jelly Roll en uno de los combates principales del evento.
Uno de los protagonistas del combate, Drew McIntyre, informó que no ha podido ingresar a Estados Unidos por complicaciones migratorias. A través de un video, explicó que se encuentra varado fuera del país, lo que ha puesto en duda su participación en la lucha programada.
Según el veterano, el problema radica en el enfoque atlético y aéreo que muchos talentos actuales adoptan. A diferencia de figuras clásicas como The Rock o Triple H, quienes mantenían sus movimientos más pegados al suelo, los luchadores de hoy realizan acrobacias extremas con frecuencia, lo que expone más las rodillas, tobillos y columna vertebral.
Esta revelación ha generado reacciones de todo tipo en redes sociales. Muchos fans han mostrado apoyo, mientras que otros han especulado sobre posibles nuevos romances.
Pero lo que más ha llamado la atención fue verla recientemente pasando tiempo con una superestrella casada de WWE RAW en backstage. La imagen rápidamente se hizo viral, y hasta Brie Bella reaccionó públicamente, lo que aumentó aún más el misterio sobre la situación.